Estos apellidos tienen su origen en un accidente del terreno, en una loma, es decir, en una elevación suave y de poca altura común a muchos puntos de la geografía regional. No pocos pueblos conservan en su toponimia los nombres que son también apellidos: La Lombana en Riotuerto, Lombera en Rasines o Lombraña en Polaciones. Incluso en otros lugares de Campoo donde topónimos semejantes no acompañaron tanto al nombre de las personas.
Los expedientes de hidalguía de varios personajes de apellido Lombana, Lombaña, Lombera y Lombraña, fechados en el siglo XVIII, confirman los orígenes geográficos de estas familias con bastante precisión.