El apellido Cacho dejó su rastro documentado en las inmediaciones de Torrelavega, Santander y Laredo en los siglos XVII y XVIII y aún a finales del siglo XIX está bien representado en el área central y oriental de la costa de Cantabria.

En Peñacastillo está el origen del apellido Rivas-Cacho, uno de cuyos descendientes fue militar en Méjico y obtuvo el título de Marqués de Rivas-Cacho en 1764. Otra rama de los Cacho creció en Perú al amparo de los cargos administrativos y militares.

Como es frecuente, hay gran confusión y fantasía con los escudos de armas de los Cacho. Los nobiliarios y algunas enciclopedias ofrecen versiones para todos los gustos que no guardan relación con otras fuentes históricas más fiables.