Son varias las leyendas relacionadas con este apellido. La más fantástica hace descender el apellido Cossio o Cosio -de las dos formas se encuentra escrito- de alguna batalla de la Reconquista andaluza, donde dos caballeros cántabros mataron a un moro gran guerrero. El Rey, al preguntar por el suceso encontró en respuesta que ‘ a ése y a sus compañeros Cos y yo les hemos matado’, a lo que el monarca respondió: ‘desde hoy te llamarás Cossio’.
Es evidente que los antiguos no se conformaban con que su apellido descendiera simplemente del nombre de un lugar, cuyo significado es muchas veces desconocido, sino que procuraban buscar un origen, una explicación, y nada mejor que las legendarias batallas de la Reconquista, en las que probablemente participaron, para dar historia y categoría al linaje de una familia.
Cierto es que la familia de los Cossio contaba con importantes posesiones en Rionansa, al menos desde el Magnífico señor Ferrán González de Cossío, que hizo testamento en 1220. De la casa troncal de los Cossio y sus derivadas descienden las ramas de este apellido en otras localidades del valle del Nansa, Liébana, Campoo, Alfoz de Lloredo y San Vicente del la Barquera. A finales del siglo XIX, los Cossio continuaban con una fuerte presencia en su lugar de origen y en la zona de influencia inmediata, aunque también se encontraba disperso en otras localidades cántabras como Santander, Torrelavega o Camargo. Varios personajes con el apellido Cossio emigraron a Argentina, México o Perú, donde el apellido se podía encontrar al igual que en Cantabria unido a otros antroponímicos, formando compuestos como García de Cossío, Gómez de Cossío y otros.